NAVIDAD 2OO7
Los reyes Magos de Oriente
van a venir a Motril
y yo pido por mi gente
aunque sea mucho pedir.
Puesto a pedir yo quisiera
que a nuestro amigo An—és
la junta le devolviera
lo que le viene a deber.
Tres meses de tribunal
sin descansar en verano,
para que le paguen mal
y sin ver nada en su mano.
Tiene su administradora
que maneja la cartilla,
que no le da ni la hora
y se calla, la muy pilla.
También con gana le pido
que le quiten de la mente
la intención de continuar
o
acabará malamente.
Parece que no comprende
que nadie es imprescindible
y
que todo ser depende
de que se funda un fusible.
También pedirles quisiera,
si no fuera mucho pedir,
que el tabaco aborreciera
y viviría más feliz.
Librito, filtro, persiana,
petaca con encendedor,
sábados de mañana
perfuma
todo alrededor.
amigos y tertulianos;
los que pasan, asombrados,
creen que canutos liamos.
De vez en cuando, prudente,
viene Cortés, el pariente,
cuenta algo amablemente
y se va tan sonriente.
Luego viene el del cupón,
se dirige a su cliente,
le entrega dos de un tirón,
cobra y se va alegremente.
Ahora me toca pedir
para el abuelo más tierno,
que disfruta y es feliz
en verano o en invierno.
Quisiera que no faltara
tanto a nuestras reuniones,
que el sábado se acordara
y no busque ocupaciones.
Yo veo bien que en invierno
lleve a Mari a disfrutar
de hija, nietos y yerno,
pero lo que estoy temiendo
es que aquí no quiere estar.
Cuando viene preparado
lo podemos aguantar,
se puede estar a su lado
y podemos conversar.
Si no ha dormido en la noche
o una muela le hace daño,
despotrica a troche y moche,
viene que no tiene apaño.
El día que viene sembrado
y con semblante risueño
está como iluminado,
de Las Palmeras es dueño.
Al que aparca por la zona
lo recibe con un beso,
y a toda mujer jamona
la mira con embeleso.
Cuando viene el cristalero
con su cigarro colgante,
lo recibe zalamero,
se le nota buen talante.
Si llega algún día Merlo
y quiere parlamentar,
dice que no quiere verlo
y que se va a levantar.
Ahora está dibujando
chistes muy buenos, de veras,
que su fama le están dando
por todas las blogosferas.
Sus chistes se los disputan
bares y cafeterías,
los clientes los disfrutan
porque pinta buenas tías.
En un blog desconocido,
con el contador parado,
puso un chiste trabajado,
y lo ha sacado del olvido.
Si este artista dedicara
un par de horas al día
y sus cosas publicara,
la fama le abrumaría.
Pero es vago sin codicia,
no practica la constancia,
su saber se desperdicia
sin darse mucha importancia.
Ahora pido solamente,
por Ma—lo, el del sombrero,
un afamado bloguero
que conoce mucha gente.
También fue de presidente
a formar un tribunal;
éste sí tuvo más suerte,
no le deben ni un real.
Ya no está en el Segalvina,
para Motril concursó
y en el Belluga termina,
que es donde estuve yo.
Dos políticos que entraron,
Escámez y Villoslada,
a Ma—lo ilusionaron
y luego no hicieron nada.
Dijeron que le darían
mando en la televisión
y luego se arrepentían
porque liaría gran follón.
Telemotril es un ente
que cuesta mucho dinero,
que la ve muy poca gente
y se le nota el plumero.
Los mismos informativos,
los mismos bustos parlantes,
han cambiado a nuevos divos
por los que salían antes.
Está mejor en la escuela,
con menos preocupación,
pues, aunque mucho le duela,
no tiene comparación.
Con su blog es suficiente
para seguir escribiendo,
lo visita mucha gente
y el contador va subiendo.
También tiene en Ideal
a Miguel Martín Romero
para poder publicar
lo que tenga en el tintero.
Cuando necesite ayuda
para un libro publicar,
que no le quepa la duda,
que le vamos a apoyar.
Los negros que trabajamos
en la sombra, sin cobrar,
siempre dispuestos estamos
a ayudarle sin parar.
Tieso como cañavera,
con sombrero y su bufanda,
como si Paco Umbral fuera,
se presenta ante la panda.
Saluda muy cortésmente,
se sienta parsimonioso,
sonríe socarronamente,
mira si hay algún curioso.
políticos, enseñantes,
cualquier otra profesión,
son temas regocijantes.
Se hacen trajes a medida
a todo el que no es honrado,
al que lleva buena vida
sin habérselo currado.
Para mí solo me pido
una pensión suficiente,
pues se termina fundido
trabajando de docente.
Que la tertulia no acabe,
que nos sigamos reuniendo,
pues nadie de fuera sabe
el bien que nos está haciendo.
Que los pastores no acaben
ni las uvas moscateles,
pues me gustan con o saben
de mi pueblo los toneles.
Un choto de vez en cuando
con vino mosto regado,
me van la vida alegrando
y lo malo se ha olvidado.
a este bisiesto que empieza,
algo habremos merecido
a pesar de la torpeza.
Reflejo lo que ha pasado
en el año transcurrido,
algo se me habrá olvidado,
que recordar no he podido.
Para el año venidero
en traeré una grabadora
y grabaré con esmero
lo que ocurra desde ahora.
Ya más no puedo escribir,
se acabó la gasolina,
me debéis sustituir
alguien con rima más fina.
Con renovada ilusión
os escribe Paco Prados,
con todo su corazón
estos ripios dedicados.
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