CAPÍTULO TERCERO
La siguiente serie son unos ripios dedicados a los
distintos compañeros y compañeras que se han ido jubilando en el Colegio
Público Cardenal Belluga, con los que hemos mantenido una larga y agradable
compañía en nuestro trabajo educando a varias generaciones de alumnos
motrileños.
La cercanía, el trato personal, la amistad,
camaradería, los criterios educativos, el cumplimiento de las normas, han sido
fundamentales para que se trabajara a su lado con alegría y hermandad. Por eso
se sentía, y mucho, cuando alguno se jubilaba. Siento no haber hecho lo mismo
con otros que se fueron antes y también lo merecieron.
La profesionalidad de todos ellos y ellas ha
quedado demostrada en el prestigio que tiene el Colegio y en la cantidad de
antiguos alumnos que están trabajando en todos los campos y profesiones.
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